Envuelta en la esencia de la tierra yucateca, esta vela de cera de soya y coco reposa en un recipiente de barro que captura la belleza serena de una casa maya. Bajo su techo de paja, rodeada de majestuosos árboles, se encuentran los mestizos yucatecos, un tributo a la rica herencia cultural que impregna cada rincón de esta creación artesanal.